Vive, y vivir no es solo respirar.
Vivir es sentir el aire en la cara llena de energía.
Hacer lo que realmente te apetece y te hace feliz. Ya sea a
contrarreloj de todos, que piensen que estas ida de la cabeza o lo que los
prejuicios de cada uno quiera poner.
Realmente cuando vayas a la dormir estés agotado por vivir y
con ganas de comerte todo lo que te propones.
Tu vida ha de tener una preciosa gama colores frescos.
Todo pasa y cada cosa por motivos distintos tanto como lo
malo, como lo bueno. Hay rachas distintas.
Necesitamos: poner una cucharada sopera de actitud positiva,
una pizca de gran sonrisa y por ultimo no olvidemos echar un ojo a lados buenos
aunque a veces parecen ausentarse, siempre están ahí por muy escondidos que
parezcan.
Por último y no menos importante hacer lo que queráis que
para eso es tu vida y la de nadie más.
Allá vamos a por otro año, nuevo aprendizaje, nuevos propósitos que cumpliremos la mitad (si eso). Pero no olvidar los imprescindibles ante todo.